Depender de nosotros mismos con la ayuda de Dios
Cuando eres autosuficiente, puedes sentirte orgulloso de tu capacidad para cuidar de ti mismo y de tu familia, y para encontrar soluciones a tus propios problemas. No solo eso, sino que estás mejor posicionado para ayudar a otros que no pueden decir lo mismo.
Ayudarnos a nosotros mismos a ayudar a los demás
“El propósito de la autosuficiencia temporal y espiritual es ubicarnos en un terreno más alto para poder elevar a otras personas que lo necesiten”. —Élder Robert D. Hales
La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días ofrece cursos locales de autosuficiencia, donde los miembros de la congregación con valiosa experiencia en la vida pueden compartir con los demás lo que han aprendido. Las cosas que se enseñan en estos cursos representan una amplia gama de habilidades para la vida y programas útiles.
Ser responsable en lo económico
La administración del dinero es una parte crucial para llegar a ser autosuficiente. Eso incluye mantenerse libre de deudas innecesarias, vivir dentro de sus posibilidades, hacer un presupuesto y ahorrar para los días de necesidad. (En otras palabras, no compres cosas que no puedas pagar). Ser responsable en lo económico puede implicar que no obtengas todas las cosas más bonitas de la vida, pero la estabilidad que obtendrás a cambio no tiene precio.
Cómo buscar empleo
Es difícil mantener a tu familia si no tienes un empleo estable. Los cursos de autosuficiencia pueden ayudarte a aprender las habilidades de búsqueda de empleo, como escribir un currículo, encontrar información sobre ofertas de empleo, establecer redes de contactos y prepararse para entrevistas. Obtén más información aquí.
Aprender un idioma
Parlez-vous français? ¿Hablas español? ¿Qué tal tu inglés? Dondequiera que vivas, si no hablas el idioma, es posible que tengas problemas para encontrar el trabajo adecuado. Hay cursos que pueden ayudarte a aprender o a dominar un segundo idioma, eliminando así una barrera difícil en el camino hacia la autosuficiencia.
Estar preparados
Además de estar preparado emocionalmente para los desafíos, vale la pena estar preparado físicamente también. Durante décadas, los líderes de la Iglesia han enseñado la importancia de estar preparados reservando suficientes alimentos, agua y otros suministros de emergencia para sostener a su familia en el caso de un desastre imprevisto, grande o pequeño.
Fondo Perpetuo para la Educación
En todo el mundo, muchas personas tienen el deseo, la motivación y la inteligencia para hacer grandes cosas, pero aún necesitan ayuda para salir de la pobreza. Tenemos el Fondo Perpetuo para la Educación, que otorga préstamos a jóvenes adultos Santos de los Últimos Días que trabajan arduamente para que puedan obtener una educación, conseguir buenos empleos y devolver sus préstamos para que el fondo pueda seguir ayudando a las personas durante las generaciones venideras.