¿Cómo te puede beneficiar la Iglesia?
Cada uno de nosotros tiene sus propias necesidades y razones para buscar una iglesia. Aunque no te conozcamos, creemos que Dios te conoce y te ama, y que Él puede dirigir tu vida a medida que te acercas a Él. Una manera de acercarnos más a Él es asistir a la iglesia. Estos son algunos de los beneficios de adorar con nosotros.
Siéntete cerca de Dios.
Tal vez estés luchando con una pregunta específica o necesites algo de dirección en tu vida. Tal vez solo necesites sentir el amor de Dios y saber que Él está a tu lado. Al escuchar los sermones y estudiar las enseñanzas de Dios, tendrás oportunidades de recibir conocimiento de Dios y sentirte cerca de Él. Él quiere comunicarse contigo, y la iglesia es un lugar para escuchar Su voz en tu corazón y en tu mente.
Participa de la Santa Cena (o Comunión)
En la iglesia, los miembros participan de la Santa Cena (o Comunión). Jesús mandó: “Tomad, comed; esto es mi cuerpo que por vosotros es partido; haced esto en memoria de mí” (1 Corintios 11:24). Al guardar ese mandamiento semanalmente en la iglesia, dedicamos tiempo a meditar, orar y recordar lo que Jesús ha hecho por nosotros. Nos comprometemos a seguirlo y a buscar inspiración para saber cómo podemos llegar a ser más semejantes a Él.
Los servicios de la Iglesia enseñan y edifican
Lo que aprendemos en la Iglesia nos brinda guía sobre cómo seguir a Dios, mejorar nuestra espiritualidad y llevar una vida mejor. Puedes ser edificado por quienes tienen tus mismas creencias, y por la oportunidad de servir y adorar. También puedes sentir el Espíritu Santo que trae “amor, gozo, paz, longanimidad, benignidad, bondad [y] fe” (Gálatas 5:22).
Sentirse conectado, apoyado y comprendido
La Iglesia es una comunidad donde podemos socializar y apoyarnos el uno al otro. Puedes hacer amigos, sentir que perteneces a un grupo y crear una red de apoyo en la que puedes confiar. La comunidad de la Iglesia nos ayuda a “llorar con los que lloran; sí, y a consolar a los que necesitan de consuelo” (Mosíah 18:9).
Aprende de los profetas vivientes
Además de las Escrituras, contamos con un profeta y apóstoles vivientes para guiarnos en la actualidad. Aunque no escuchamos de ellos todos los domingos, los escuchamos por lo menos dos veces al año en una reunión mundial de la Iglesia llamada conferencia general. Los profetas nos ayudan a saber cómo mantener a Jesús como una prioridad en nuestra vida acelerada, y también nos brindan guía espiritual para los desafíos y oportunidades únicos del mundo actual.
Escucha las experiencias de otras personas
Ali
“Una de las formas en que escucho a Jesucristo es escuchar las historias de otros, que edifican la fe. Me encantan las reuniones de testimonio que se celebran el primer domingo del mes, porque están llenas de experiencias de cómo las personas han sentido la mano de Dios influir en su vida, han visto milagros o se han convertido al Salvador. Estas experiencias refuerzan mi fe y me recuerdan mis propias experiencias de conversión”.
Palo Alto, California
Carly
“Asistir a la iglesia me ha ayudado a dedicar el tiempo que quizás había estado posponiendo para centrarme realmente en Jesucristo, en el Padre Celestial y en Su participación constante en mi vida”.
Mesa, Arizona, EE. UU.
Eliza
“Me encanta que cada uno sea único, con logros y pruebas diferentes. Esto nos permite aprender unos de otros, centrarnos más en los demás y comprender que todos estamos tratando de ser más como Cristo. Me encanta asistir a la Iglesia, aprender más de los demás y escuchar sus testimonios. Eso me ha ayudado a seguir aumentando mi propio testimonio”.
Farmington, Utah
Tucker
“Me encanta que la iglesia sea un lugar lleno de amigos que no te juzgarán y que siempre están dispuestos a ayudarte”.
Kansas City, Misuri, EE. UU.
Jim
“Me encanta cómo la comunidad de mi iglesia siempre está preparada para ayudarme y cómo no se apresuran a juzgarme por mi situación, sino que buscan la manera de hacerme sentir mejor y ayudarme en mi situación”.
Odem, Texas, EE. UU.
Grace
“Asistir a la iglesia me ayuda a sentirme renovada para la semana que viene. Me da la fuerza para tener fe en tiempos difíciles y recordar al Salvador todos los días”.
Cedar City, UT
María
“Me encanta que estemos unidos por nuestro amor por el Evangelio, nuestro amor por los profetas y nuestra firme fe en nuestro Padre Celestial”.
Thousand Oaks, California
Shyam
“Para mí, es el único lugar donde se me permite cometer errores; donde hay varias manos que me levantan si me caigo. Una verdadera hermandad se experimenta en las comunidades de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días”.
Nueva Deli, India
¿Qué sucede después de que asista?
¡Esperamos que encuentres un domingo para acompañarnos! Si disfrutas de tu experiencia y deseas seguir edificando tu fe con nosotros, te recomendamos que te reúnas con los misioneros y consideres el bautismo.
Los misioneros pueden ayudarte a aprender acerca de nuestras creencias al compartir mensajes breves sobre Jesús, el plan que Dios tiene para ti y cómo puedes fortalecer a tu familia, entre muchos otros temas. Pueden responder las preguntas que tengas sobre la Iglesia y cómo hacerse miembro.
Reunirse con los misioneros no significa que hayas decidido unirte a la Iglesia. Es simplemente una manera de aprender más al respecto. Al reunirte con los misioneros, obtendrás un testimonio de Jesús y de Su Evangelio, y podrás seguir Su ejemplo al ser bautizado. Juan el Bautista bautizó a Jesús por inmersión en el río Jordán (véase Mateo 3:13–17).
Te invitamos a reunirte con nosotros, aprender de Jesús y disfrutar de todos los beneficios que ofrecen nuestra iglesia y nuestra comunidad.